El mes de octubre está lleno de celebraciones en la Iglesia Católica, y una de ellas es la festividad dedicada a los ángeles guardianes.
Personalmente, rezo junto a mi hijo a nuestros respectivos ángeles guardianes todas las noches, y reconocemos su valor en nuestra existencia por lo cual quiero compartirles estos hechos, citas del Papa y de los Santos.
El Papel Fundamental de los Ángeles Guardianes
Los ángeles guardianes son instrumentos de la providencia que nos protegen de sufrir daños graves y nos guían en el camino de la salvación.
Desde temprana edad, la Iglesia Católica nos enseña que cada uno de nosotros tiene al menos un ángel guardián desde el nacimiento.
El Papa Francisco ha dedicado homilías a reflexionar sobre la importancia de los Ángeles de la Guarda.
En una homilía en la Iglesia de Santa Marta, el Papa compartió: “El ángel guardián o custodio sí existe, no es una doctrina fantasiosa sino un compañero que Dios ha puesto en el camino de la vida” [fuente]
En una Audiencia General en el patio de San Dámaso del Vaticano el 30 de septiembre de 2020, el Santo Padre nos recordó acudir a nuestros Ángeles Custodios para que “nos ayuden a mantener la mirada fija en Jesús”. Subrayó la importancia de acudir a ellos “en todas las situaciones de nuestra vida”, diciendo: “Acudamos a ellos frecuentemente en la oración, para que nos socorran en todas las situaciones de nuestra vida y nos ayuden a mantener la mirada fija en Jesús, nuestra única salvación”.
¿Quiénes son los Ángeles Custodios?
En Catholic.net encontramos que Los Angeles Custodios son seres espirituales, invisibles pero luminosos, que se describen tradicionalmente como fuertes y sonrientes, con alas.
El catecismo de la Iglesia Católica los define como criaturas espirituales que poseen inteligencia y voluntad, son inmortales y superan en perfección a todas las criaturas.
Los Ángeles de la Guarda ofrecen su ayuda las 24 horas del día durante toda la vida.
Comunicándonos con Nuestros Ángeles Guardianes
En el articulo titulado Angeles Guardianes de ewtn.com encontramos que “podemos rezar al ángel de la guarda, no como un acto de adoración, sino como un homenaje debido a que son los ministros de Dios enviados para servir en nuestra salvación.
La Escritura muestra que la oración a Dios a menudo da frutos a través de la mediación y ayuda de los ángeles. Por ejemplo, la oración de Abraham por Sodoma y el pedido de sanación de Tobías resultaron en la intervención de los ángeles.”
También podemos rezar al ángel de la guarda de otra persona, como hacían muchos santos, como San Josemaría Escrivá, o como lo hacia el Papa San Juan XXIII que en su diario del alma, nos cuenta que cuando tenía alguna reunión, solía enviar a su ángel antes para que conversara con el ángel de la persona con quien iba a reunirse. Y lo hacía especialmente si se trataba de una reunión importante o si preveía que iba a ser difícil.
Oración al Ángel de la Guarda
Angel de mi Guarda, Dulce Compañía, No me desampares ni de noche ni de día, hasta que este en paz y alegría, con todos Los Santos, Jesus, Jose y Maria
Mi hijo y yo la rezamos cantando. Sentimos en ese momento que nuestros ángeles están felices acompañándonos, y que agradecen el gesto por ser nuestros personales custodios.
¿Te gustaría compartir si también has aprendido algo nuevo sobre tu Ángel de la Guarda hoy?
