El invierno trae consigo la temporada de estar en casa, acurrucados, leyendo, escuchando musica, viendo programas de tv, películas y juegos de mesa en familia, y ¿qué mejor manera de crear recuerdos dulces que con una receta clásica y encantadora de galletas de jengibre? Estas delicias aromáticas no solo son un placer para el paladar, sino que también ofrecen la oportunidad perfecta para una actividad divertida y creativa con los más pequeños de la casa.
Esta receta es excelente en muchos aspectos: es fácil de seguir, utiliza ingredientes comunes y económicos, y proporciona una experiencia inolvidable en la cocina. Las galletas de jengibre se convierten en una forma especial de celebrar las fiestas, infundiendo un toque de tradición y calidez en cada paso.
Costo:
Con elementos básicos como harina, azúcar, especias y melaza, esta receta se ajusta perfectamente a cualquier presupuesto. Además, los ingredientes son fáciles de encontrar y seguramente ya los tienes en tu despensa, lo que hace que preparar estas galletas sea aún más conveniente y accesible.
Ingredientes:
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Galletas de Jengibre:
2 1/3 tazas de harina
2 cucharaditas de jengibre rayado (o de los que vienen en envases pequeños)
1 1/2 cucharadita de canela
1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio
1/4 cucharadita de sal
1/4 cucharadita de clavitos de olor rayado
3/4 taza de mantequilla (a temperatura ambiente)
1/2 taza de azúcar morena
1/2 taza de melaza
1 huevo
Glaceado:
2 tazas azucar en polvo
2-3 cucharadas de leche
1/4 cucharadita de vainilla
PROCEDIMIENTO
Preparación de la masa: Una mezcla simple de harina, especias, azúcar y melaza que, una vez combinada, crea la base perfecta para estas galletas.
Formado y horneado: Con cortadores de galletas en forma de estrella, árbol de Navidad o cualquier diseño que prefieras, da forma a la masa y hornéala hasta que estén doradas y crujientes.
Decoración opcional: Invita a los pequeños a decorar las galletas con glaseado, chispas de colores o cualquier adorno que les inspir
PASOS
¡Vamos a Hacer galletas de jengibre!
Paso 1: Preparación. En un recipiente grande, mezcla la harina, el bicarbonato de sodio, la sal, el jengibre, la canela y el clavo. Reserva esta mezcla.
Paso 2. Batir. En otro recipiente, bate la mantequilla y el azúcar moreno hasta que la mezcla esté suave y cremosa. Agrega la melaza y el huevo, y continúa batiendo hasta que estén bien combinados.
Paso 3: Mezcla seca y húmeda. Incorpora gradualmente la mezcla de ingredientes secos a la mezcla húmeda. Mezcla hasta que todos los ingredientes estén bien combinados y obtengas una masa uniforme.
Paso 4: Enfriamiento. Envuelve la masa en film transparente y déjala reposar en el refrigerador durante al menos 1 hora para que se enfríe y sea más fácil de manejar.
Paso 5: Formado y horneado. Precalienta el horno a 375 F (o 190°C) . Extiende la masa sobre una superficie enharinada y usa cortadores de galletas para darles forma. Coloca las galletas en una bandeja para hornear y llévalas al horno durante 8-10 minutos, hasta que los bordes estén ligeramente dorados.
Paso 6: ¡Los peques pueden ayudar! ¡Es hora de involucrar a los más pequeños de la casa! Invita a los niños a participar en la formación de las galletas y luego a decorarlas después del horneado, cuando esten frias. Deja volar su creatividad y diviértanse juntos haciendo diseños únicos en las galletas.
Paso 7: Glaceado: mezcla la leche, azucar y vainilla, y coloca en una bolsa de decorar, vuelve a colocar en la nevera por unos minutos o hasta que las galletas esten todas horneadas y frias, listas para decorar
Paso 8: Es la hora de decorar, si tus hijos son muy pequenos para ayudarte a formar las galletas, esta parte seguro que si pueden acompanarte y disfrutar mientras prueban las galletas y las decoran con el icing que preparaste. Puedes colocar el glaceado en mas de una bolsa, asi todos puedan disfrutar decorando las galletas. Deja que los niños den rienda suelta a su creatividad decorándolas con glaseado, chispas de colores y todo lo que su imaginación les dicte.
Paso 9: ¡Disfruta! Es hora de compartir las galletas con el resto de la familia, o amistades, o bien en una noche de juegos de mesa, de peliculas, etc.
Hacer galletas de jengibre es mucho más que solo hornear. Es una oportunidad para crear recuerdos duraderos y compartir momentos especiales con los seres queridos. ¿Buscas más recetas fáciles y divertidas para compartir con los niños durante estas fiestas? ¡Suscríbete a este blog para que no te pierdas mis pequeños y fáciles tutoriales que harán que la diversión en la cocina sea interminable!
